ChatGPT – Versátil y creativa
Fuerte: Ideal para redactar, planificar, generar ideas o mantener una conversación fluida.
Desventaja: No tiene acceso en tiempo real a internet en su versión gratuita.
Aplicación real: Desde escribir mails o posts, hasta pedirle que te organice una rutina o te explique algo paso a paso.
Perplexity – Precisa y con fuentes
Fuerte: Busca en la web y cita las fuentes. Ideal para investigar.
Desventaja: Es más “robótica” en su tono y menos creativa.
Aplicación real: Encontrar información actualizada y confiable para tomar decisiones o aprender algo nuevo.
Claude – Lector experto (con Artifacts)
Fuerte: Lee y entiende textos largos (PDFs, artículos, informes).
Desventaja: A veces puede ser demasiado “formal” en sus respuestas.
Aplicación real: Resumir documentos, analizar textos complejos o guardar proyectos como Artifacts, que son como archivos vivos que podés seguir editando con IA.
Gemini – Integrado con Google
Fuerte: Se lleva perfecto con herramientas como Gmail, Drive o Docs.
Desventaja: En algunos casos, sus respuestas pueden ser más limitadas que otras IAs.
Aplicación real: Hacer resúmenes de mails, generar ideas en Docs o buscar rápido dentro de tu Google Drive.
DeepSeek – Técnica y detallista
Fuerte: Muy buena para programación, traducción técnica y tareas matemáticas.
Desventaja: Menos amigable en su interfaz que otras.
Aplicación real: Resolver problemas de código, hacer análisis o explicaciones técnicas claras.
Copilot – El copiloto para programar
Fuerte: Asiste en tiempo real mientras programás. Ideal para desarrolladores.
Desventaja: No es muy útil si no tenés conocimientos técnicos.
Aplicación real: Escribir código más rápido, detectar errores o sugerir mejoras mientras trabajás.
Grok – Conectado al presente
Fuerte: Accede en tiempo real a X (ex Twitter) y se le pueden programar tareas automáticas.
Desventaja: Aún no tiene muchas funciones académicas.
Aplicación real: Consultar qué se dice sobre un tema, crear alertas automáticas (ej: "avisame todos los días si hay tráfico en tal ruta").
En resumen…
No existe una sola IA perfecta, sino herramientas diferentes para necesidades distintas.
Podés combinar varias, o elegir una según el momento.
En los próximos artículos del blog, voy a contarte en profundidad cada una, con ejemplos prácticos y datos clave para que sepas cómo usarlas de verdad.